Quien hubiera imaginado horas antes de la emisión del primer episodio de “Glee”, en el cual se pudieron conocer por primera vez los rostros del coro escolar más famoso de la televisión, el hecho de que en un tiempo más recolectarían un éxito tras otro, y se ganarían el reconocimiento y respeto de los más grandes críticos de la industria televisiva.
Pues bien, el éxito recolectado por Glee no sólo corresponde a los críticos televisivos, sino que también ha legado a conquistar audiencias cada vez más numerosas, gracias a sus espectaculares musicales y versiones de los temas preferidos por todos. Así, en su segunda temporada, Glee ha llegado al súmmum, en el momento de la emisión del capítulo estrenado luego de la final de la Super Bowl, el pasado domingo: ese día Glee supo hacer disparar su audiencia hasta los 30 millones de espectadores.
El capítulo en cuestión tuvo varias particularidades, inteligentemente programadas por los guionistas, y que tuvieron que ver directamente con esta importante ocasión para la televisión y el deporte estadounidense: a raíz de esto fue que una de ellas tuvo que ver, precisamente, con el hecho de haber orientado la temática del episodio hacia un ámbito deportivo.
Además de esto, y de haber sido el episodio más caro en cuanto a realización de toda la serie (el cual también se ha logrado introducir dentro del ránking de los más caros de la historia de las series norteamericanas), también ha contado con la particularidad de tener dentro de sus escenas una especial versión del mega hit de Michael Jackson, Thriller, el cual formó parte de un mash up con “Heads will roll”, del grupo Yeah Yeah Yeahs.
